El expedicionario español Antonio de la Rosa ha logrado retomar su ritmo de travesía polar en el día 26 de su desafiante aventura al Polo Sur Geográfico. Tras una pausa obligatoria de aproximadamente 60 horas debido a un episodio de ceguera de las nieves, Antonio ha recuperado casi completamente la salud ocular y reporta estar al 95% de su capacidad visual. Su determinación y auto-control, unida a una buena asesoría profesional, han sido clave para superar este nuevo escollo en su expedición por el desierto polar antártico.
En su reporte telefónico vía satélite, Antonio compartió que, a pesar de las condiciones adversas, logró cubrir 40 kilómetros en la jornada de ayer. «Fue una etapa durísima, con muchísima subida y terreno muy roto. Estoy especialmente cansado hoy», comentó. Sin embargo, este avance lo deja satisfecho y motivado para continuar.
En cuanto a los recursos (provisiones), Antonio asegura que cuenta con suficiente combustible, indicando que de los 7 litros iniciales aún conserva 3. No obstante, en términos de alimentación, se mantiene justo, alargando las comidas y ajustándose a las limitaciones calóricas que le ha tocado administrar estratégicamente.
La travesía de Antonio de la Rosa no solo destaca por su carácter extremo, sino también por su capacidad de inspirar a quienes siguen su historia. Este hito es un recordatorio de la fuerza humana frente a los desafíos más duros de la naturaleza.
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COMUNICACIONES “POLO SUR EXPEDICIÓN EN SOLITARIO”
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